Dice la leyenda que cuando agonizaba, Bram
Stoker dijo: “strogoi, strogoi” (que en rumano significa “espíritu maligno”
mientras señalaba con la mano hacia un rincón oscuro de la habitación.
Escribo esto porque hoy por la mañana al
conectarme a Internet me he encontrado con este doodle que nos recuerda que hoy
hace 165 años que vino al mundo el creador de Drácula
y recordé que este año se cumplía el primer centenario de su muerte. Un año
Stoker que ha tenido bastante menos repercusión que el año Dickens salvo algún
que otro evento,
quizás con razón puesto que la mayor parte de la obra de Stoker ha caído en el
olvido a excepción de esa obra memorable, mientras que Dickens es… Dickens.
Sin embargo, aquí va mi particular
recuerdo al autor de una novela que, si bien no está en mis top
ten, me encantó en su momento, y al creador de un mito que sigue cautivando
hoy en día.
Lo leí hace muchos años y recuerdo que me gustó y me dio mucho miedo, pero pienso volver a leerlo. Es más, creo que lo leeré en cuanto acabe con el que estoy ahora. ¿Alguien se aopunta a ir leyéndolo a la vez y comentarlo?
ResponderEliminarMe gustaría apuntarme, sobre todo porque nunca lo he leído y tengo cierta curiosidad. En cualquier caso, lo pongo en la lista de lecturas, para cuando pueda encontrar tiempo.
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